1 de septiembre de 2009

'Si me siento culpable, conmigo mismo seré implacable'


"Culpa. F. Falta en el cumplimiento de los deberes morales o jurídicos cometida a sabiendas o por imprudencia o negligencia."

Seguramente en algún momento de nuestras vidas nos hemos sentido culpables. Alguna decisión mal tomada, un descuido que se convirtió en un error, una acción que se convirtió en una gran molestia.

Algunos filósofos, atribuyen la culpa al mismo hecho de la imperfección humana. En Oriente atribuyen la culpa de nacimiento al karma o aflicción que heredamos de vidas anteriores Y en el sentido teológico es la trasgresión voluntaria de la ley.

Sea como sea, podríamos decir que la culpa es una cadena que consiente o inconscientemente nos colocamos a nosotros mismos. ¿Por qué?

Porque la culpa en sí siempre nos traerá un sentimiento de remordimiento e inquietud, que no nos permite ser libres sin recordar acontecimientos pasados, y al estar siempre en el pasado no podemos visualizar el presente y menos aún proyectarnos bien hacia el futuro.

Muchas veces la culpa nos acosa y nos acusa. Muchas veces es algo difícil dejarla a un lado por el profundo dolor que se pueda sentir o más sentimiento de igualmente culpa por no aceptarla y más aún a esto le añadimos a los comentarios sociales que apoyan a la misma.

Pero hay que recordar, que a más de simplemente producir alguna especia de dolor, la culpa puede ayudarnos a darnos cuenta de nuestros errores, es aquella que nos impulsa a su equilibrio que es el perdón.

La culpa es el castigo por errar, el perdón es la eximición al comprender el error.

De modo que la liberación de la culpa, nos permite ser libres.

“Toda culpa exige reparación o perdón, de otra manera obstaculiza el normal flujo de la vida.

“El sentimiento de culpa baja la autoestima y desarrolla odio a si mismo. Este odio se puede proyectar en forma de violencia hacia los otros.

Punto inspirador

Hay un remedio para la culpa, reconocerla. - Franz Grillparzer,

Aururu

1 comentario:

  1. ¡Hola de nuevo! Me ha encantado tu blog. Así que realmente no siento culpa al agregarte a mi lista de lectura, jaja

    Saludos, abrazos y besos desde Puebla, en México ;)

    --Arminius.

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